La protección pasiva contra incendios se refiere a medidas de seguridad diseñadas para reducir la propagación del fuego, el humo y el calor, sin necesidad de intervención activa. Esto se logra mediante el uso de materiales resistentes al fuego, sistemas de compartimentación y otras técnicas que limitan el avance del fuego.
En América Latina, la protección pasiva contra incendios ha sido tradicionalmente menos valorada que la protección activa, como los sistemas de extinción de incendios y los sistemas de detección de incendios. Sin embargo, en los últimos años ha habido un aumento en la conciencia sobre la importancia de la protección pasiva, especialmente en edificios de alta ocupación y en infraestructuras críticas.
Los códigos y normas de construcción en América Latina han adoptado cada vez más medidas de protección pasiva contra incendios. Por ejemplo, en Brasil, la Norma Reguladora 23 establece requisitos para la protección contra incendios en lugares de trabajo. En México, la Norma Oficial Mexicana NOM-002-STPS-2010 establece requisitos para la prevención y protección contra incendios en los centros de trabajo. En Argentina, el Código Nacional de Edificación establece requisitos para la protección contra incendios en edificios.
Además, hay una creciente demanda de soluciones de protección pasiva contra incendios en América Latina, especialmente en edificios de gran altura y en infraestructuras críticas como hospitales, aeropuertos y centros de datos. Esto ha llevado al crecimiento de la industria de la protección pasiva contra incendios en la región.
Una de las soluciones más utilizadas en América Latina es el uso de paneles de yeso resistentes al fuego. Estos paneles están diseñados para limitar la propagación del fuego y proporcionar una barrera contra el humo y el calor. Otros materiales comunesmente utilizados en la protección pasiva contra incendios incluyen el hormigón, la lana mineral y la fibra de vidrio.
En conclusión, la protección pasiva contra incendios es cada vez más importante en América Latina, y se espera que continúe creciendo en los próximos años. La adopción de códigos y normas de construcción que requieren medidas de protección pasiva, así como la creciente demanda de soluciones de protección pasiva en edificios de gran altura y en infraestructuras críticas, están impulsando el crecimiento de la industria de la protección pasiva contra incendios en la región.